lunes, 12 de mayo de 2008

Horizonte dorado


Te busco entre el retumbar de las teclas en noches de desvelo, en las rojizas horas derretidas por el sol virtual, en los silencios que ahogan las desdichas de la espera, en la calma de la medianoche entre murmullos de sonidos callejeros, en las puertas del infierno cibernético, en los amores sin remisión... te busco entre miradas de pasiones perdidas, en las palabras de los poetas que me dieron mis primeros pensamientos, en esas noches de dulce espera, en recuerdos de viajes placenteros repletos de sonrisas de transeúntes indiferentes, en las horas de nuestros sueños repletos de desalientos y trazos de locura, en los pasos ausentes y olvidados de leyendas que soñamos de esos días soleados.


En todos esos sitios te encuentro, dorada melena al viento, refulgente cual cascada de brillos y sueños, reabriendo el cajón de mi conciencia donde guardo las pocas horas de nuestra inédita historia, soñando indulgente con marabunta de besos cruzados, robados entre barras de bar y masajes utópicos, de manos reposando entre manos, entre mamparas de hielo laboral, al placer de las palabras rebotando en nuestros austeros oídos, entre risas de inocencia perdida por el desdén de la nostalgia, rodeados de placeres soñados sin medidas sobre los ribetes azul cielo de tus cambiantes ojos de gata, gorgoteo de cálidas pisadas sobre moqueta compartida, de disculpas y austeras sensaciones envueltas de sentimientos de otras vidas.


Te veo con la firmeza de la paz que emiten esos esculturales ojos que titilan en tu rostro, con la fantasía con la que tus sorprendidas cejas reciben mis palabras referentes al sueño de una brisa ondeante sobre tu esbelto cuerpo, con el baile de tu talle austero y aspirante, con la luz de tus manos que con cuidado mimaron mi curvada espalda, con el dulce dibujo de tu sonrisa incesante, y ese tierno vaivén de tu cintura, adornadas por el sonido de tus políglotas palabras que reverberan mi mente con la sinceridad de tus sentimientos y el sosiego de tus perlados pensamientos.


Sabes de la rapidez con que se han llenado las horas muertas, los momentos brillantes de la espera en nuestra vidas, de los momentos olvidados en días pasados tan lejanos el uno del otro, y ahora, el presente alegre que nos envuelve y nos resguarda del separado pasado y anima nuestro cariño litúrgico con sosiego y libertad, transportando los descansos en recuerdos que nos confesamos transformando los inviernos en índigos veranos... que libertinaje el desenvolver de nuestras charlas.


Saldrá el sol y cuajará las frases vespertinas, anhelante de nuestro aliento electrónico, sopesando lo que deseas, restringiendo lo que florece en tu mente, tambaleando toda tu esencia existencial. Y a lo lejos el escueto mirar del estrepitoso deseo que espera agazapado a que los gestos de tu angelical rostro borboteen sin limitación hasta mi efímera existencia.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A veces no nos damos cuenta de muchas de las cosas que pasan a nuestro alrededor pero nunca es tarde... Espero que esta vivencia tuya crezca y se torne realidad!!! Es un placer leerte.

Besos

Anónimo dijo...

Por partes.... se puede decir que con las TECLAS se dice mucho y acaba por detallar TRAZOS DE LOCURA, habrá que subentender cada gota dicha y saber que es el "azul cielo". Sin duda que los OJOS SON ESCULTURALES y que tras ellos hay sentimientos, pero hace falta sosiego y libertad para no dejarse llevar por esas frases vespertinas que hace con que todo sí sea y quede en una efímera existencia....