domingo, 16 de septiembre de 2007

Enfermando

Prefirió la muerte al sufrimiento por la quietud serena de la muerte, cuanta aciaga adversidad la que convierte este amor idílico en fatal lamento, y está éste lleno de desconsuelo e incluso las sonrisas vierten lágrimas, con el gozo de la angustia, pues sólo aspiramos a un girón de viento que encauce definitivamente nuestras vidas en un camino paralelo.

Dolor inevitable del amante leal que eres y yo culpable por amarte cada día, vibrando en el borde rojo de mi herida, pues tu presencia es signo de la vida, y llevamos años de amor, que sólo ha pretendido un beso, una palabra, un hálito, un sonido... y, a pesar de nuestra esperanza, cada día evidencio que detrás de tu mente no existe el silencio.


Si yo no me hubiese enamorado de ti hace tanto tiempo, qué paz sin cataclismos ni vórtices, sin cimas ni abismos regocijaría hoy tu cuerpo y en mi no existiría ese deseo febril y omnipotente de ir por las noches a besarte en la frente, de bajar con la luz de un astro zahorí, a decirte al oído: “No te olvides nunca que te quiero”. Y tú, que me quieres más de lo que nunca soñé, callas inexorable, y no sé sino dudar de todo, del alma, del destino, y ponerme a llorar en medio de esta vida, pues con desolación infinita evidencio que sin ti muero y mientras tanto, simplemente te mato.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

A fuerza de hablar de amor, uno llega a enamorarse. nada tan fácil. esta es la pasión más natural del hombre.
Muy intenso artista. Eres un crack.

Anónimo dijo...

Por fin he descubierto como firmar, ya te dije que creo que esas palabras solo tienen sentido si nacen de una persona profundamente enamorada, o al menos que lo estuvo en su día, mil besos

Megadoux dijo...

Pos añadido quedas a mi lista de Blogs
Deberías escribir más, por cierto, que me encantan tus textos

Megadoux dijo...

arreglado, ya sólo estás una :-)
No me había dado cuenta de ello

Sibyla dijo...

Solo quiero morirme si te matas ..
sólo quiero matarme si te mueres,
porque el amor cuando no muere mata,
porque amores que matan nunca mueren

J.Sabina